
Nara
Pyros

Y Pyros se pusó a caminar, adentrándose en el bosque, seguido por su hermano (para que no se perdiera) y por Hino (buscando seguramente venganza).


Y así prosiguieron la marcha, fue un viaje bastante tranquilo e inusual, ya que esta vez era Hino el que molestaba a Pyros, que se encontraba demasiado preocupado en guiar al grupo como para maquinar diabólicos planes en su contra, apenas tenía tiempo para lanzar alguna que otra llamarada a Hino en respuesta a sus bromas.
Y tras un largo recorrido, y dar cientos de vueltas, Pyros reconoció que se habían perdido totalmente.

Kertch ya estaba a punto de sacar sus espadas y degollar a Pyros cuando, de la nada apareció un misterioso viajero.
(Nota del autor: No proseguir si no se ha visto Art Attax (art attack doblado), esto es un homenaje a ese gran hombre. ¡¡QUEREMOS MÁS VIDEOS HIJO DE PUTA!!)

El grupo entero se quedó flipando, no habían entendido ni una sóla palabra, bueno, no todo el grupo, Pyros miraba con total normalidad a aquel ser y asentía, como si fuera capaz de entenderlo. Al ver la cara de sus compañeros dijo:








Y tras este incidente, el grupo prosiguió la marcha, esta vez con Kertch como encargado de mantener el rumbo, que aunque no estaba del todo seguro de que su hermano hubiera entendido a aquella extraña criatura y temía que todo esto no fuera más que producto de sus desvariaciones, era consciente de que no contabancon otra cosa para salir de allí.
Tras bastante más andar y andar, el grupo alcanzó al fin su objetivo. Una enorme explanada se extendía justo enfrente de ellos, y en el centro estaba emplazada la fortaleza, de inmensos y sólidos muros, de la que antes habían oído hablar. Kertch era consciente de que aquello sería seguramente una trampa, pero no dijo nada al respecto, total, Pyros haría lo de siempre, correr, gritar y fumar. Debía de poner todo su ingenio en que la misión no fuera todo un fracaso, todo un reto, teniendo en cuenta de que entraban en el territorio del enemigo, dándole así la ventaja del campo.
Tardaron relativamente poco en cruzar la explanada, Pyros no podía aguantar más y había empezado a empujar a sus compañeros hasta arrastrarlos a la fortaleza. Cuando estaban a punto de llegar las enormes puertas que comunicaban el interior y el exterior de aquella inexpugnable fortaleza, estas se abrieron para dar salida a 3 misteriosas figuras, cerrándose tras de si.
Poco a poco se fueron acercando hacia esas tres figuras, hasta quedar a pocos metros de ellas. Por consejo de Kertch, cada uno de ellos eligió un objetivo que, en caso de pelea, se encargarían de eliminar. Pyros eligió rápidamente a uno con un peinado bastante extraño, argumentando algo de disposición de pelos y facilidad para encender. Una vez con sus adversarios fijados, cada uno se situó enfrente del suyo, manteniendo una distancia prudencial.



Pyros realizó unos rápidos sellos y lanzó una gran bola de fuego que tiró de espaldas a su adversario, pero que misteriosamente no le causó ninguna quemadura.


Kertch no podía dar crédito de lo que estaba oyendo telepaticamente, aquél desgraciado iba a desatar a "La Bestia. Recordaba bastante bien el combate que hace tiempo tuvo Pyros contra otro también de la liga, combate que al final ganó autoprovocándose el mono y transformándose por completo en otro ser, mucho más poderoso y alocado.

La frase de Pyros quedó interrumpida por un súbito y penetrante dolor, era el mono, había vuelto y esta vez con más fuerza que en su anterior batalla. El joven nara comenzó a retorcerse en el suelo, invadído por el dolor. A pesar de los cientos y cientos de petas que se fumaba no podía quitarse el mono de encima, tenía que probar con algo más gordo. Poco a poco el cuerpo del suu fue, bajo la atónita mirada de su adversario, ganando en volumen y cambiando de color, poniéndose más y más verde. Necesitaba fumar, y sus porros no le aliviaban. Más bestia que humano, Pyros se acercó corriendo hacia unos árboles cercanos y comenzó a arrancarlos para luego fumárselos, eran de mayor tamaño que sus petas, pero su efecto seguía siendo nulo. La transformación era ya completa, el mono le había poseído por completo, ante semejante visión su adversario solo pudo decir:


(Hacer click en la imagen para agrandar)
No hay comentarios:
Publicar un comentario